Es una idea fabulosa, y sin embargo la producción empieza ahora, tras 6 años con el diseño metido en un cajón. Kenguru, la compañía húngara responsable de este coche a tenido que esperar a que la abogada tejana Stacy Zoern mueva los hilos para que pueda comenzar la fabricación de este pequeño coche urbano.
El coche puede recorrer hasta 110 kilómetros a una velocidad máxima de 45 kilómetros por hora. Muy poco. Costará 25.000 dólares, demasiado. Y sin embargo la idea de evitar necesitar pasar de la silla de ruedas al asiento del coche, plegar la silla y cargarla en el asiento de al lado o de atrás es muy, muy buena.
Fuente: Amazing
Autor: Samuel Franco Domínguez
http://rehabilitacionblog.com
Hola: es verdad que es una buena idea pero ya antigua (recordemos el AROLA). En España ha habido una empresa extremeña(Vexel) que desarrolló un vehículo como éste. Creo que cerró en España pero hay una página de un vehículo derivado de él en los Estados Unidos (http://www.quovis.com/about.htm) Los precios de estos vehículos son excesivos y antes de comprarlos hay que ver si responden a todas nuestras necesidades ya que hay personas que precisan mandos más adaptados que los que se ven en las fotos que se muestran. Un ejemplo es la dirección asistida o un mando tipo joystick. Otro problema es que suelen ser uniplaza. Otro problema es que cuestan lo que una buena berlina y dan prestaciones de minimoto. He mirado por ahí y he visto que se venden de segunda mano algunos vexel por un precio muy por debajo de los 20.000 euros.(http://www.coches.net/aixam-vexel-quovis-l4-en-pontevedra-26805654-scvo.aspx).
ResponderEliminarUn cordial saludo